La festividad cristiana más importante y grandiosa, el día de la alegría eterna, la Resurrección de Cristo, se celebra en memoria del día en que Cristo, el Hijo de Dios, venció a la muerte.
La Pascua es una festividad conmovedora; siempre se celebra en domingo, y su fecha se calcula a partir de la luna llena que precedió a la Resurrección de Cristo en el año 30 a. C., y puede caer entre el 4 de abril y el 8 de mayo según el calendario gregoriano, o entre el 22 de marzo y el 25 de abril según el antiguo calendario juliano. La decisión de celebrar la Resurrección de Cristo se tomó en el primer Concilio Ecuménico de Nicea en el año 325. La Iglesia Ortodoxa celebra la Pascua según el calendario juliano.
La Pascua está precedida por un ayuno de siete semanas, y la última semana antes de la Pascua se llama la Semana Santa. Muchas costumbres populares están asociadas a esta semana, la más famosa de las cuales es la pintura de huevos, que se realiza el Viernes Santo. El primer huevo se pinta de rojo, y en muchas partes de nuestro país se le llama "ama de llaves" y se conserva durante todo el año para proteger el hogar hasta la siguiente Pascua. Pintar y decorar huevos, que en realidad son un símbolo de resurrección, es una costumbre que sin duda adoran los niños. El Día de la Resurrección de Cristo se celebra con una solemne liturgia en las iglesias, y los creyentes se saludan con las palabras: "¡Cristo ha resucitado!", "¡En verdad, ha resucitado!".
Los niños disfrutan especialmente de esta festividad cristiana tan alegre, porque la celebración de la Pascua es también un día de alegría, diversión y juegos infantiles. Antiguamente, los niños se levantaban temprano la mañana de Pascua, se lavaban con agua en la que habían remojado huevos durante la noche y se frotaban las mejillas con la "ama de llaves" para, según la creencia, estar sanos y sonrosados. Los niños pasan la Pascua jugando, buscando huevos, regalos, chocolates y dulces escondidos por el jardín y la casa, y regalándose huevos de Pascua de colores. Las alegres costumbres pascuales y los alegres juegos infantiles se acompañan de canciones apropiadas, de las cuales la más famosa hoy en día es la que se canta sobre los versos del obispo Nikolaj Velimirović: "¡Cristo ha resucitado y trae la alegría!".
Realización artística del número: MA Nadežda Skočajić, Artista Gráfica Académica.