Durante dos décadas, cada mes de julio, Olmedo renueva su firme compromiso con el teatro clásico, un patrimonio cultural de primer nivel forjado con la poderosa materia prima de la lengua y las manifestaciones literarias que la enriquecen.
Este arraigado idilio teatral en el corazón de la ancha Castilla encuentra su origen, en última instancia, en Lope de Vega. Sin proponérselo, el Fénix de los Ingenios sembró una vocación escénica inquebrantable en esta histórica villa, rica en cultura, arte y gastronomía, cuyo nombre quedó indisolublemente ligado a uno de los grandes títulos del teatro universal.
La programación, cuidadosamente integrada y concentrada, facilita que un público cada vez más numeroso y experto disfrute de una selecta variedad de espectáculos. El festival tiene su epicentro en la Corrala del Palacio del Caballero, un teatro de magia singular, cuyo escenario tiene como telón de fondo la muralla medieval, testigo de tantos hechos cruciales del pasado. En cada edición, el certamen se esfuerza por presentar la diversidad de autores, géneros, épocas y territorios que abarca el teatro clásico europeo, así como las múltiples perspectivas dramatúrgicas y estéticas que las compañías profesionales exploran. Las agrupaciones nacionales e internacionales más prestigiosas han pisado sus tablas.
Del mismo modo, el Centro de Artes Escénicas San Pedro, fruto de la restauración de la iglesia barroca del convento de la Merced, con su espléndida bóveda de yeserías churriguerescas, ha acogido a figuras esenciales del estudio, la dirección, la interpretación y la gestión teatral, en las "Jornadas sobre teatro clásico", un punto de encuentro enriquecedor donde académicos y profesionales de la escena dialogan entre sí y con el público. Cursos de interpretación especializada, exposiciones y publicaciones completan esta apuesta integral que invita a explorar los clásicos desde todas las perspectivas contemporáneas.
